Después de un tiempo guardado en el baúl de los inconclusos, o de haberse transformado en un "MUF", poco a poco he vuelto a tomarlo, a darle puntadas multicolores, para que de una vez por todas vaya tomando forma.
Ya tenemos un toldo y un quitasol, donde lentamente empiezan a llegar los clientes a tomarse un café, seguramente en un fresco atardecer; cuando las gaviotas aparecen tímidas, revoloteando y graznando para llamarse unas a otras para viajar juntas a su cobijo de esa noche...
No encuentro las horas de poder comenzar con ese jardín florido y multicolor que llenará de vida a los visitantes de esta hermosa bahía.